Thursday, January 25, 2007

de castigos .-

Ya ha aparecido mi abuelo un par de veces en La Bitácora, sin embargo hay algo que nunca ha salido a la luz. Resulta que Don Eduardo en su juventud fue un hombre de carácter difícil, incomprensivo y a veces cruel, muy cruel.
Mi tío Artemio trabajaba en conjunto con mi abuelo para un granjero avícultor, sin embargo cada peso que recibía, mi abuelo se lo retiraba ya que era necesario "para la casa". Mi tío en plena juventud con la hormona tan alborotada y esas ganas de conquistar a todas las jovencitas del rancho se sentía impotente de no tener ni un peso para llevarles ya no digo una serenata, mínimo una flor; así que un día se robó unos cuantos huevos de la granja para venderlos por su lado y obtener un ingreso. Su suerte no fue tan buena y rápidamente mi abuelo lo descubrió, como castigo lo colgó de los dedos pulgares por un par de horas. Ante tan cruel castigo mi conclusión fue que los huevos que mi tío tomó debieron haber sido los de mi abuelo.

8 comments:

Vaquera Galactica said...

pues debieron educarte de la misma manera vato, debiste educarte con el abuelazoo!! para que crecieras derecho ahjajajaja... por cierto, ya corregí mi falta orrográfica... contento?

coca said...

es tu tio el que se quedo soltero?
ahora lo entiendo todo

Anonymous said...

pobreciiiiitoooo.... ¿pero quien le manda andar agarrando huevos que no le pertenecen?

Anonymous said...

pues hay quien no tiene los huevos para robar...

chui romo said...

100 puntos para vallejo.

Anonymous said...

ke tristeee pobrecito¡¡¡ por huevudo lo colgaron....a mi tmb una vez me colgaron, por hacer travesuras, me colgaron en el tendedero (o como se llame), y alli me dejaron por un bueeen ratoo....

Anonymous said...

de que te sirve robarte los huevos de alguien mas, si tarde o temprano tendran que regresar a su lugar ?

no hay peor castigo que la crueldad del amor y auto/destruccion

Anonymous said...

chiaale gia